DESARROLLO Y EVOLUCION EMPRESARIAL: LIDERAZGO Y COACHING

La nueva Era de la Economía del Conocimiento se caracteriza por que ésta utiliza el concimiento como elemento fundamental para crear valor añadido en los productos y servicios en cuyo proceso de creación participa y lo hace no sólo generando valor y riqueza por medio de su transformación en información. El conocimiento es mucho más que mera información. La información son datos procesados con una utilidad general, mientras que el conocimiento significa formas, métodos y maneras de abordar y resolver problemas. Significa entre otras muchas cosas, “Know-how”, “Know Who” o herramientas o medios de producción para producir a su vez, o más conocimiento o productos y servicios con un valor añadido, útil y cuantificable para la sociedad.

La Economía del Conocimiento denota una transición hacia una producción basada en la ciencia y la tecnología. Pero la Economía del Conocimiento, además de los elementos “objetivos”, “lógicos” o “racionales” del conocimiento, incluye también los elementos “subjetivos”, “analógicos” o “emocionales” del mismo, como la intuición, la sensibilidad y la expresión artística. Para fundar el desarrollo sostenible de una sociedad se requiere tanto capital racional como emocional, financiero como relacional, tecnológico como cultural. No es la acumulación de capital (el crecimiento) sino el balance del mismo (el desarrollo integral) lo que brinda identidad, salud, cohesión y viabilidad futura a una sociedad y lo que constituye su verdadera riqueza.

En esta Economía del Conomiento, la Empresa del Futuro, la Empresa Sostenible, debe integrar estos valores y estos elementos e invertir también en Capital Humano e Intelectual. Tanto la Empresa del Futuro como sus Directivos, Líderes y Trabajadores del Saber deben tener unas cualidades y capacidades específicas. Algunas de ellas son el desarrollo personal y profesional que incluye el autoconocimiento. Es muy importante que sean también innovadores y creativos, flexibles y capaces de adaptarse a los frecuentes cambios, que muestren interés genuino de responsabilidad social, que tengan capacidad de atender al futuro. Que tengan curiosidad e interés por aprender continuamente, además de capacidad de resiliencia, de afrontar y de superar la adversidad, que cultive las relaciones humanas y que establezcan redes de comunicación y de vinculación, que conozca y tenga en cuenta sus emociones y las de los demás, que muestre empatía y que integre la intuición en beneficio del aprendizaje, de la toma de decisiones y del buen desempeño que conduzca a la innovación-prosperidad alejándose de la rutina y la mediocridad.

Los caballos y la naturaleza junto con el facilitador (psicólogo, entrenador, coacher…) y la naturaleza nos presentan situaciones en las que vivimos experiencias prácticas que nos brindan la oportunidad de aprender y desarrollar estas y otras habilidades y capacidades que necesitan tener los Líderes y los Trabajadores del Saber de la Empresa Sostenible.